Encuentran un dodecaedro romano en Inglaterra
Las grandes civilizaciones siempre se interesaron por la geometría, tanto mesopotámia, Egipto y Grecia, dieron grandes contribuciones al estudio de la geometría. Para algunos la geometría y la espiritualidad estaban entrelazadas, tal es el caso de los pitagóricos quienes decían que los números tenían propiedades místicas y divinas. Debido a esto, no es raro encontrar objetos geométricos en la arqueología.
"Pitágoras transformó la filosofía concerniente a ella (esto es, a la geometría), en una forma de educación libre, examinando sus principios desde lo supremo e investigando los teoremas de un modo inmaterial e intelectual; él fue quien descubrió la manera de tratar los irracionales y la constitución de las figuras cósmicas". Proclo, Elementos 65, 16.21
"El matemático Apolodoro dice que (Pitágoras) sacrificó cien bueyes cuando descubrió que, en el triángulo rectángulo, al cuadrarse la hipotenusa, (dicho cuadrado es) igual (a la suma de los cuadrados construidos sobre los lados) que circundan (al ángulo recto). Y hay un epigrama que dice: cuando Pitágoras descubrió célebre figura, ofreció en su honor un afamado sacrificio de bueyes". Diogenes Laercio, VIII, 12.
Recientemente, en Inglaterra en Lincolnshire, se descubrió un dodecaedro galorromano hecho de una aleación de cobre, tiene 8 cm de altura y es hueco. Un dodecaedro es un cuerpo geométrico de 12 caras planas, cada una forma un pentágono y en Europa se han encontrado al rededor de 100 de época romana, la mayoría datan de entre el siglo I y V d.e.c., a pesar de sus numerosos hallazgos no se ha podido descifrar su función o uso.
El dodecaedro hallado en Lincolnshire se encuentra en exhibición en el Museo de Newark.
Algunas hipótesis sugieren que era usado de forma mística, relacionándolo con los elementos del universo. Así mismo el dodecaedro aparece como una de las cinco figuras solidas en los textos pitagóricos, dice Jamblico en su tratado vida pitagórica XXXIV: "Dicen que el primero que reveló la naturaleza de la conmensurabilidad y de la inconmensurabilidad a los (considerados) indignos de participar en tales teorías fue abominado a punto tal, que no sólo lo expulsaron de la comunidad y de la casa común, sino que incluso le construyeron una tumba, como si efectivamente hubiera perecido para la vida que, junto a hombres, había llevado quien alguna vez había sido su compañero. Otros dicen que la divinidad se disgustó con los que divulgaron las (doctrinas) de Pitágoras; en efecto, por el sacrilegio cometido pereció en el mar el que reveló cómo se inscribía en una esfera la constitución del icoságono (esto es, el dodecaedro, una de las cinco figuras llamadas sólidas). Pero algunos han dicho que esto sucedió al que se explayo acerca de la irracionalidad y de la inconmensurabilidad".
Es importante aclarar que los Pitagóricos constituían una orden de filósofos que mantenían en secreto sus enseñanzas, Nota a pie de pagina de Gredos sobre los Filosofos Presocraticos volumen 12 de la biblioteca clásica, dice:
"Más aún si se acepta la historia tardía, admitida también por Heath (narrada por Luciano, sofista del siglo II e.C. y por un escoliasta de Las Nubes), según la cual los pitagóricos usaban como contraseña o distintivo un pentagrama, esto es, un pentágono regular cuyos lados se prolongan hasta un punto de intersección (formando así una estrella de cinco puntas). Entonces, dice Heath, dado que el dodecaedro requiere para su construcción 12 pentágonos regulares, podemos aconcluir que el dodecaedro es inscribible en una esfera y hallar su centro, sin un procedimiento tan elaborado como el de Euclides, XIII 17, para su construcción. Pero v. Fritz va más lejos, ya que, dentro del pentágono regular, traza todas las diagonales posibles (cinco), formando así en el centro otro pentágono en (el cual se repite el proceso, y asf sucesivamente. Con ello se demuestra, según v. Fritz, la inconmensurabilidad de cada diagonal a cada lado".
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